~El Arbol Sagrado~
 

 
 

Bienvenidas mis Druidas

 

No olvidemos que el mayor trabajo de Magia de una Druida no es "hechizar" a nadie, sino utilizar nuestra energía en desvelar  (Poner de manifiesto lo que estaba oculto) nuestras propias Sombras en el logro de la propia Individuación y en beneficio del Bien común....

La única obediencia que reconoce nuestra evolución es seguir el camino indicado por nuestra voz interior... la llamada  del Alma...Nuestra humildad genuina radica en reconocer que aunque podemos estar avanzando por el sendero correcto, siempre estamos caminando y aprendiendo... Lo primero que necesitamos para reclamar, despertar y recuperar a la "Druida interna", es aceptar la diversidad de mundos visibles e invisibles...
Aceptar con naturalidad a los Seres de Luz y Sombra que viven en nosotras y abrazar el temor para asumir esas realidades como parte de la Vida...En otras culturas más conectadas con la Naturaleza, las personas se reúnen alrededor del fuego a contarse historias...Cada historia trae sabiduría y Luz a la comunidad para ser incorporada a la Vida de todos...Es este desarrollo de nuestra Druida  interna en forma individual, consciente y responsable, lo que finalmente puede conectarnos a todos...

La luna oscura es el período de tres días y medio de duración, sólo antes de la luna nueva. La luna no es visible en el cielo durante este periodo, y las Druidas de acuerdo con las energías de las fases lunares se abstienen de toda actividad mágica hasta el momento que  la luna oscura pasa. Según la luna antigua, los hechizos lanzados durante la luna oscura es probable que mejore sucesivamente los resultados que uno desea. Pero también es verdad que ahora las Druidas  observan la luna oscura como un tiempo de descanso y recuperación. Es un momento ideal para la meditación, la visión, misiones, y la planificación de futuros  hechizos, rumbo al territorio en el que lo ordinario puede transformarse en extraordinario.....

Soñemos!....

Ser Druida  es reconocer que estás conectada con la Naturaleza y ejercer esa conexión, dejarla ser… es utilizar el poder ancestral que tenemos las mujeres a favor de la humanidad. Cada cierto tiempo un grupo de mujeres comienza a trabajar en el desarrollo del Ser “Desarrollo del Alma” pasando por ciertos niéveles que las van reencontrando en el desarrollo espiritual, despertando redescubriendo y potencializando sus dones:

  Esencia de las Diosas : Aprenden que el amor es el sentimiento y la religión universal y que el amor se antepone al perdón, cada una redescubriéndose como Mujer, plena, radiante, creadora, mágica, y unida a la divinidad haciendo sinergia con otras mujeres se les entrega su capucha blanca y si logran asimilar el trabajo en sinergia femenina se les entrega también su capucha verde.

  Aprendiz de Magia: Una vez que han aprendido las leyes del amor universal con ejercicios y practicas transformacionales y que han aprendido a silenciar a la loca la casa y a hacer más caso al alma y al corazón y dejando de lado a la razón que todo juzga y cuestiona, aprenden técnicas para ver el aura, regresiones a vidas pasadas, el poder de la intención, interpretación de sueños, magia en las iglesias y el culto a la Diosa en las Iglesias. Al término de este bello módulo de aprendizaje se les entrega su túnica su cordel y su varita mágica para pasar al siguiente Nivel

  Mago: Donde aprenden numerología, lectura de runas, tarot, aromaterapia y color terapia, este nivel  es muy mágico y bello pues cada una aprende el uso de piedras, herbolaria, inciensos, magia con velas, y muchos temas más que nos reconectan con la parte esencial de la mujer, la reconexión con la madre tierra por medio de nuestra mujer salvaje que se une a los ciclos de la vida y aprovecha de cada elemento de la madre tierra sus dones y obsequios en este nivel la Druida recibe al graduarse su caldero. 

Diaconisa Aquí la Mujer aprende sobre los ciclos lunares, y estacionales, aprende a asistir a la sacerdotisa en los rituales y celebraciones de vida, a rendir culto a la vida, al amor, a la Diosa y a Dios recibiendo su anillo de triple Diosa y es aquí donde deciden dar el gran paso 

Se prepara al grupo para que puedan instruir a otras mujeres en todo lo que ellas ya han aprendido hasta el momento, se instruyen en las practicas más profundas de celebración y culto a fin de poder realizar ellas mismas los rituales invocar a los 4 elementos, y transmitir todo el aprendizaje recorrido a fin de ayudar a otras mujeres en su trascendencia y desarrollo, físico, mental, emocional y espiritual, aquí se les entrega al dar sus votos de amor y servicio a Dios Diosa su tiara Lunar.  

¿Que hace una Druida?

Una Druida hace de Dios, Diosa parte importante en su vida, manteniendo un equilibrio pleno, sin fanatismos que dividen sino más bien predicando con el amor que une. Celebra las celebraciones lunares, estacionales y de paso continúan estudiando sobre la Diosa que habita en ellas mismas. Se reúnen con sus hermanas druidas mensualmente para intercambiar conocimientos y juntas seguir creciendo  Una vez que hemos descubierto al amor como única y verdadera religión aprendemos que ninguna religión, filosofía ni creencia están peleadas unas con otras, por tal motivo respetamos todas las ideologías y las fusionamos para hacer de todas ellas una sola, es así como del cristianismo reconocemos al Gran Maestro Jesús como el Gran Mago de Magos y el Gran Alquimista, de las tradiciones ancestrales seguimos la práctica y el culto a la Diosa y a las estaciones del año, al sol a la luna, a la energía femenina y el culto a la Diosa Madre en equilibrio con Dios Padre, y así de cada filosofía vamos tomando lo que nos ayuda a trascender, entonces a veces nos escucharás recitando mantras, otras más nos verás aullando y danzando a la luna y otras más sentadas en alguna Iglesia llenándonos de toda la magia que ellas encierran.  Así que nuestra misión como Sacerdotisas es Crear unión y sinergia y no la división.

¿Como deciden las mujeres ser druidas? Este bello camino comienza cuando comenzamos una búsqueda, cuando descubrimos que queremos un cambio en nuestras vidas y que ya lo material no es suficiente en nuestro camino, también da comienzo cuando decidimos cerrar ciclos en nuestras vidas debido a ciertas aptitudes y patrones que no entendemos y que cuando vamos acercándonos a nuestra Diosa regente entendemos el por que actuamos de cierta manera en la vida, porque tendemos a repetir patrones y asimilamos que la vida es mucho más fácil de lo que creemos cuando dejamos de luchar y de ser guerreras y es ahí cuando comenzamos ese desarrollo del Ser por el camino que nos lleva a redescubrirnos y reencontrarnos como mujeres plenas, radiantes, prosperas, alegres, sanas, llenas de sueños, planes y proyectos de vida, cuando aprendemos a cerrar heridas, a amar a los que nos han lastimado dejando a un lado el ego, enamorándonos de nuestra esencia más pura y Crítica y es ahí cuando mirándonos al espejo descubrimos ese hermoso brillo de nuestra alma a través de la mirada y comenzamos el camino buscando que otras mujeres se reencuentren consigo mismas.

Una Druida aprende a descubrir sus cualidades y deja de sumergirse en sus debilidades y carencias, y con ello aprende a cerrar ciclos como lo marcan las estaciones, y a renacer como el Ave Fénix, a volvernos alquimistas de nuestra esencia, donde el carbón de nuestras debilidades lo convertimos en el oro de nuestras virtudes. Una sacerdotisa se une al amor y la grandeza de Dios Diosa triple reconociendo esa trinidad en nuestra propia vida y rindiendo culto al equilibrio del sagrado masculino con el sagrado femenino.  Y es ahí cuando sentadas en círculo en amor y humildad abriremos nuestros oídos y nuestro corazón al aprendizaje para trascender, para dar, y darnos con amor a los demás, para recibir con gratitud y con amor de los demás, viviendo en unidad, en amor y en confianza plenas.  Namaste Flores y energía Frescas para sus caminos

La Ley de la  Atracción...

El "secreto" es elevar tus frecuencias vibracionales...Para atraer algo que deseas es importante que tus frecuencias se mantengan en la escala elevada, ya que si sientes envidia, o te encuentras triste o temerosa, enojada, llena de dudas, ira o cualquier otra frecuencia baja nunca obtendrás  aquello que deseas...

 Para atraer aquello que quieres:

La fórmula es mantenerte en frecuencias vibracionales altas... amor, pasión, felicidad, alegría, paz, armonía, etc...Por todo ello te digo que “vivir en una frecuencia vibracionales alta" es indispensable... De otra manera estaremos creando desde una frecuencia equivocada y nuestros resultados serán acorde a esa frecuencia desde donde estamos creando, cuando estamos en un lugar vibracional denso, caemos en depresión y atraemos otros humanos que están en nuestra misma escala de miedo, depresión, tristeza, apatía, amargura, odio, violencia...Cuando elevamos nuestro contenido vibracional comenzamos a encontrar soluciones que antes éramos incapaces de “ver” o tenemos acceso a lugares donde antes no podíamos entrar atraídos a otra clase de personas y también nos llegan ideas geniales que estando en bajas frecuencias no podríamos tener...

Una forma rápida de elevar tus frecuencias vibracionales es haciendo aquello que amas... bailando, cantado, pintando, caminando... no hay actividades específicas, porque cada quien tendrá sus elecciones...Las vibraciones del agradecimiento o aprecio y la del amor son las más altas que existen en el universo... por eso hay que amar y agradecer siempre...Así que sigue agradeciendo y amando todas las cosas buenas que tienes e ignora o corrige las malas y ve sintiendo la alta frecuencia vibracional del agradecimiento y del amor...

“La sabiduría femenina es la sabiduría de la Tierra. La sabiduría de las estaciones, de la luna creciente y menguante. Es la sabiduría de entender que la necesidad de descanso y reflexión es tan importante como la necesidad de actividad. Es... la sabiduría del cuidado y la ternura, del deseo y la certeza de nuestro poder para manifestar nuestros deseos si estos nos emocionan. Es la sabiduría de los sueños y la intuición. Los hombres la tienen también, pero se les ha enseñado a ignorarla; a las mujeres, en cierto modo, también, pero eso está cambiando ahora”

Digo de mí que soy druida en varios sentidos: en primer lugar porque es una palabra desafiante. Hay que  devolverle su verdadero valor, y detectar a las personas de mentalidad escasa. Aquellos/as que preguntan “¿tu eres druida?, pero las druidas eran malas y tu no pareces demasiado mala”. A esas personas no les voy a explicar de que se trata mi tarea, en cambio a quien pregunta ¿y qué es ser Druida ? -con el adecuado asombro, curiosidad y respeto-, le contaré que la palabra druida, las druidas fueron miembros de la clase sacerdotal en Gran Bretaña, Irlanda, Galicia, la Galia (Francia), y posiblemente otras partes de la Europa Céltica durante la Edad de Hierro, e incluso antes. Significa varias cosas: poder femenino, mujer de poder, mujer que conoce su poder y lo usa, mujer que conoce las palabras mágicas o de poder.

Druida sanadora, de magia blanca, de manos dulces, de sonrisa tranquilizadora, de mente limpia de oscuros pensamientos. Estas Druidas iluminan, encuentran caminos perdidos, sanan lo que se ha roto, rompen con lo malo. Hay druidas sanadoras de distintos tipos y se incluyen dentro de las otras druidas que veníamos hablando:

Quienes sanan con sólo escuchar, escuchan y cuando hablan unen puntos, dan esperanza, iluminan las mentes nubladas. Son sanadoras de la mente, de las esperanzas rotas, de la inspiración caída.

Quienes sanan con las manos. No sólo con imponer las manos y conjuros dulces, que salen de sus labios cálidos. También están aquellas que conocen los puntos de las manos, de los pies, de todo el cuerpo, tocan, masajean, acarician y alivian. Están aquellas que saben de hierbas y brebajes, que con cocinar unas pocas delicias curan tristezas, levantan ánimos, curan dolores de estómago y de cabeza. Ellas tienen los secretos de la Madre Tierra.

Están las sanadoras que cantan, ellas alivian al que está por cruzar el último umbral, acompañan al enfermo, hacen dormir al niño angustiado. Sanadoras de elementos, que con la energía de la tierra, de las piedras, de las plantas, del agua, calman dolores, equilibran almas dolidas, devuelven energía mal gastada. Sanadoras que saben de música y de aromas. Ellas entienden los secretos de las armonías, saben de la fuerza de las fragancias regaladas por la tierra. Ellas despiertan los sentidos dormidos por aquel que más nos domina: la vista.

Y cuantas sanadoras más hay! Creo que todas las Druidas tienen mucho de sanadoras, ¿No os parece?

 

 

 

 
 

 
 
 
 
 

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